MI EXPERIENCIA CON EL ARTE EN LA ESCUELA
Desde mis inicios en la escuela, a los tres años, me intentaron inclucar el copcepto de arte, pero como es lógico, a esas edades es imposible que los niños entiendan y acepten el concepto de arte; de ahí que en esas edades las clases se ceñían única y exclusivamente a manipular y a crear figuras de plastilina.
Con el paso del tiempo y con la llegada a los estudios primarios o al antiguo EGB, mi concepto de arte cambió. Durante los primeros años de primaria, mis clases consistían únicamente en ejercicios de manipular diferentes materiales, como pueden ser barro, platilina, o incluso crear diferentes objetos con las típicas pinzas de la ropa de madera junto con un poco de cola haciendo sobretodo cestos o jarras
Luego, cuando pasábamos de curso y dependiendo del profesor que te tocase, cambiamos de activiades aunque más o menos siempre solían ser las mismas de un curso a otro.
Cuando era una fecha especial como es el día del padre o de la madre, unos días antes hacíamos alguna actividad más concreta y dirigida, para luego regalárselos a nuestros padres en ese día, como pueden ser unos pendientes de barro para nuestra madre o una corbata de cartulina para nuestro padre, aunque este tipo de activiades solo las hacíamos en fechas muy señaladas.
Con el paso al instituto, en el primer y segundo curso, las clases de plástica se cambiaban por dibujo técnico. En estos cursos me acuerdo que teníamos una profesora que controlaba un montón, sobre el óvalo, el ovoide y todo lo relacionado, y ella pretendía que nosotros fuéramos a su ritmo, lo que conseguía que toda la clase nos perdíamos, y terminábamos haciendo otra cosa completamente diferente a lo que ella quería.
Ya en el último curso de instituto, las clases de plástica, era de lo más simpáticas de lo que te puedas imaginar, ya que la profesora pretendía que fueran como una preparación para los labores y la vida cotidiana de uno; ya que los niños tenían la obligación de hacer trabajos de tipo masculino, como eran los trabajos de marquetería, o el trabajar con un espejo rayándolo por la parte trasera con un punzón hasta conseguir una figura o algún dibujo. Mientras tanto las niñas, como no hacíamos los labores de las niñas, desde punto de cruz, ganchillo, calceta o algún tipo de abalorios.
Ahora con el paso del tiempo todavía me río de esas clases, pero también me doy cuenta de las ideas que tenía esa profesora.
Hasta aquí mi experiencia con el arte desde mis inicios en la edad escolar hasta ahora, aunque la verdad es que desde tercero de BUP no volvía a tener ni plástica ni dibujo, salvo el año pasado en primero que tuve obradorio de cor, lo cual me pareció muy interesante ya que a lo largo de ese cuatrimestre el profesor nos enseño mucho acerca de los colores y de diferentes testuras útiles para realizar numerosas tareas de tipo plástica o de manualidades.
Una cosa me gustaría comentar es que cuando estaba en 3º de BUP, fuimos de excursión a Italia, y la verdad es que la principio me parecía un poco coñazo eso de ir a visitar cosas relacionadas con arte y todo eso, pero la verdad es que cuando llegué al interior de la Capilla Sixtina y vi esos ángeles pintados en el techo de la cúpula, me quedé totalmente entusiasmada con ellos al igual que con el David de Miguel Angel, el cual me pareció una escultura muy impresionante la cual no se puede explicar con palabras, sino que animo a todo el mundo que si tiene la oportunidad de verla que no le piense dos veces porque merece la pena hacer un viaje tan largo.
Desde mis inicios en la escuela, a los tres años, me intentaron inclucar el copcepto de arte, pero como es lógico, a esas edades es imposible que los niños entiendan y acepten el concepto de arte; de ahí que en esas edades las clases se ceñían única y exclusivamente a manipular y a crear figuras de plastilina.
Con el paso del tiempo y con la llegada a los estudios primarios o al antiguo EGB, mi concepto de arte cambió. Durante los primeros años de primaria, mis clases consistían únicamente en ejercicios de manipular diferentes materiales, como pueden ser barro, platilina, o incluso crear diferentes objetos con las típicas pinzas de la ropa de madera junto con un poco de cola haciendo sobretodo cestos o jarras
Luego, cuando pasábamos de curso y dependiendo del profesor que te tocase, cambiamos de activiades aunque más o menos siempre solían ser las mismas de un curso a otro.
Cuando era una fecha especial como es el día del padre o de la madre, unos días antes hacíamos alguna actividad más concreta y dirigida, para luego regalárselos a nuestros padres en ese día, como pueden ser unos pendientes de barro para nuestra madre o una corbata de cartulina para nuestro padre, aunque este tipo de activiades solo las hacíamos en fechas muy señaladas.
Con el paso al instituto, en el primer y segundo curso, las clases de plástica se cambiaban por dibujo técnico. En estos cursos me acuerdo que teníamos una profesora que controlaba un montón, sobre el óvalo, el ovoide y todo lo relacionado, y ella pretendía que nosotros fuéramos a su ritmo, lo que conseguía que toda la clase nos perdíamos, y terminábamos haciendo otra cosa completamente diferente a lo que ella quería.
Ya en el último curso de instituto, las clases de plástica, era de lo más simpáticas de lo que te puedas imaginar, ya que la profesora pretendía que fueran como una preparación para los labores y la vida cotidiana de uno; ya que los niños tenían la obligación de hacer trabajos de tipo masculino, como eran los trabajos de marquetería, o el trabajar con un espejo rayándolo por la parte trasera con un punzón hasta conseguir una figura o algún dibujo. Mientras tanto las niñas, como no hacíamos los labores de las niñas, desde punto de cruz, ganchillo, calceta o algún tipo de abalorios.
Ahora con el paso del tiempo todavía me río de esas clases, pero también me doy cuenta de las ideas que tenía esa profesora.
Hasta aquí mi experiencia con el arte desde mis inicios en la edad escolar hasta ahora, aunque la verdad es que desde tercero de BUP no volvía a tener ni plástica ni dibujo, salvo el año pasado en primero que tuve obradorio de cor, lo cual me pareció muy interesante ya que a lo largo de ese cuatrimestre el profesor nos enseño mucho acerca de los colores y de diferentes testuras útiles para realizar numerosas tareas de tipo plástica o de manualidades.
Una cosa me gustaría comentar es que cuando estaba en 3º de BUP, fuimos de excursión a Italia, y la verdad es que la principio me parecía un poco coñazo eso de ir a visitar cosas relacionadas con arte y todo eso, pero la verdad es que cuando llegué al interior de la Capilla Sixtina y vi esos ángeles pintados en el techo de la cúpula, me quedé totalmente entusiasmada con ellos al igual que con el David de Miguel Angel, el cual me pareció una escultura muy impresionante la cual no se puede explicar con palabras, sino que animo a todo el mundo que si tiene la oportunidad de verla que no le piense dos veces porque merece la pena hacer un viaje tan largo.
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